Descripción
Aplicando su claridad analítica a los relatos religiosos de una variedad de fuentes, Santiago elabora un marco pluralista en el que «lo divino no puede significar una cualidad única, debe significar un grupo de cualidades, al ser campeones de las cuales en la alternancia, diferentes hombres pueden encontrar misiones dignas». Es un llamado intelectual a la tolerancia religiosa seria, de hecho, al respeto, cuya vitalidad no ha disminuido a lo largo de las décadas siguientes.