Descripción
Las mujeres transitamos este mundo cargando mandatos, el deber ser: ser buena hija, novia, esposa, madre, amante, femme fatal. Desde temprana edad, se despliega una enorme cantidad de exigencias sobre nuestro cuerpo y comportamiento.
¿De dónde viene esa fuerza que nos lleva a un único destino de cuidadoras una y otra vez? ¿Quiénes somos y qué deseamos cuando no estamos agradando, cuidando, o amando? ¿Por qué las mujeres de todo el mundo lideramos todos los índices de la desigualdad y cómo se traduce esto en nuestra vida?
María Florencia Freijo propone una lectura interesantísima por la historia, la industria cultural y del entretenimiento, para averiguar en qué momento nació esta diferencia social que nos ha convertido en personas con menos derechos, menos ingresos, menos justicia. Pero, sobre todo, por qué pese a esto seguimos desplegando todos nuestros recursos en tiempo, atención, y dinero, obsesionadas por el amor romántico, pensando en la familia tipo como único destino posible.
Con casos concretos de la historia y el presente, y recuperando la historia de las mujeres que no pudieron elegir, como nuestras abuelas, reconstruye los mandatos que se presentan como naturales y juegan en contra de las mujeres. Tomar conciencia para que nuestros silencios tomen voz es el primer paso para nuestra nueva libertad.