Descripción
Wilhelm Reich fue el pionero de las terapias corporales. Observaba qué pasaba en los cuerpos de sus pacientes para aceder a su inconsciente. Consideraba la vida sexual de cada uno como un espejo de su energía vital (el famoso orgón). La función del orgasmo, para él, era un potencial que no se limitaba a lo genital. También fue uno de los primeros en señalar la represión ejercida por el Sistema sobre el cuerpo social. Pese a que sus aportes resultaron tan significativos como los de su maestro Freud, Reich no tuvo una vida fácil. Fue expulsado del Partido Comunista y de la Asociación Psicoanalítica, debió huir de los nazis, la policía norteamericana lo persiguió y encarceló. Sus libros fueron quemados. Santo, genio, impostor. David Zane Mairowitz, el autor de Kafka para Principiantes, lo presenta como a un hombre lúcido en extremo y obsesionado por abrir puertas al conocimiento psicosomático.