Descripción
Las Puertas del infierno, la gran obra que el Estado francés encargó a Rodin para un supuesto Museo de artes Decorativas, fue terminada al tiempo que el gobierno de turno cancelaba el proyecto. Dicha pieza se convirtió entonces en materia creativa para otras ideas como El pensador o El beso. No sospechaba Rodin que años más tarde inspirarían este drama.