Descripción
EI tercer grado de la Masonería, el de Maestro, implica algo más que conocer las palabras y efectuar los signos correspondientes: atañe a la conquista suprema, simbolizada por el místico ramito de acacia, señal de conocimiento verdadero. El Maestro venció la ignorancia, el fanatismo y la ambición. Controló el poder del silencio. Administró sabiamente sus talentos. Captó la esencia real de su augusta y gloriosa institución. Hizo converger todos sus esfuerzos en la unificación masónica.