Descripción
Estas palabras fueron cortadas hace mucho tiempo. Hay moho verde en los surcos de las letras y rayas amarillas en el mármol, que vienen de más años de los que los hombres podrían contar. Y estas palabras son la verdad, ya que están escritas en el Palacio del Consejo Mundial, y el Consejo Mundial es el cuerpo de toda verdad. Así ha sido desde el Gran Renacimiento, y más allá de lo que ningún recuerdo puede alcanzar.
Pero nunca debemos hablar de los tiempos antes del Gran Renacimiento, de lo contrario, estamos condenados a tres años en el Palacio de Detención Correctiva. Solo los Ancianos son los que susurran al respecto en las noches, en el Hogar de los inútiles. Susurran muchas cosas extrañas, de las torres que se elevaron al cielo, en esos tiempos inconfesables, y de los carros que se movían sin caballos, y de las luces que ardían sin llama. Pero esos tiempos eran malos. Y esos tiempos pasaron, cuando los hombres vieron la Gran Verdad que es esta: que todos los hombres son uno y que no hay salvará la voluntad de todos los hombres juntos.
Todos los hombres son buenos y sabios. Solo nosotros, Igualdad 7-2521, somos los únicos que nacimos con una maldición. Porque no somos como nuestros hermanos. Y cuando miramos hacia atrás en nuestra vida, vemos que siempre ha sido así y que nos ha llevado paso a paso a nuestra última transgresión suprema, nuestro crimen de crímenes escondidos aquí debajo del suelo.