Descripción
Usted la ha visto. Puede que la haya usado. Quizá haya orado ante ella. ¿Pero la conoce? Cualquier análisis serio de las afirmaciones del cristianismo es, en su esencia, un estudio de la cruz. Aceptar o rechazar a Cristo sin un examen cuidadoso del Calvario es como decidir acerca de un automóvil sin mirar el motor. Así que, mire bien a la cruz. Examine esta hora en la historia. Mire a los testigos. Escuche las voces. Observe los rostros. Más que todo, observe aquel a quien llaman El Salvador.